Evaluación de la Implementación de Políticas Climáticas (Metodología)

Evaluación de la Implementación de Políticas Climáticas (Metodología) Según el Sexto Informe de Evaluación del IPCC, se necesitan reducciones inmediatas y profundas de emisiones en todos los sectores para mantener el objetivo de limitar el aumento de la temperatura global a menos de 1.5 °C. Muchos países han incrementado su ambición de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en su Contribución Nacionalmente Determinada (NDC, por sus siglas en inglés). Sin embargo, el nivel de ambición colectiva sigue siendo insuficiente para mantenerse por debajo de 1.5 °C. Descargar Publicaciones relacionadas Climate Policy Implementation Check (Methodology)
Electromovilidad: necesaria pero no suficiente

Electromovilidad: necesaria pero no suficiente Por Verónica Garibay y Adrián Fernández Bremauntz. El reciclaje es considerado por la mayoría de las personas como la acción más importante para reducir el cambio climático, según una encuesta realizada por la consultora global IPSOS en 2021 sobre la crisis climática. Evitar el consumo de carne y de fast-fashion también han adquirido mucha popularidad en las redes sociales como medidas efectivas para reducir la llamada huella de carbono personal. Es decir, las emisiones de gases de efecto invernadero que produce cada persona en función de los medios de transporte que utiliza, la cantidad de energía que usa en el hogar, los tipos de alimentos que más prefiere y sus hábitos de consumo en general. Sin embargo, un estudio del World Resources Institute, publicado el 9 de abril pasado, muestra que, si bien estas acciones son benéficas, cambiar hacia formas de movilidad sustentable es mucho más efectivo. Durante la pandemia, mi amiga G se mudó fuera de la CDMX, aprovechando las condiciones de trabajo remoto que adoptaron tantas empresas. Finalmente tenía un jardín para sus hijos y su perro, una cocina grande y un espacio para que ella y su esposo hicieran home-office. Dos años después vendió la mitad de los muebles y los juegos de jardín que había comprado y regresó a vivir en un departamento que renta por aproximadamente el mismo monto que su casa del triple de superficie en otra ciudad. “Cuando terminó la pandemia yo usaba el coche para todo, mi esposo viajaba a la CDMX cada semana y lo veíamos poco, comía muy mal y tenía cansancio crónico y ansiedad. Ahora caminamos todas las mañanas para llevar a mis hijos a la escuela, mi esposo se va en bici a su trabajo, conocemos a nuestros vecinos y comemos juntos todos los días. Tenemos todos los servicios cerca y prácticamente no uso mi camioneta, salvo para viajar fuera de la ciudad. Sí, el espacio es más pequeño, no tenemos jardín, pero nos evitamos el estrés del tráfico, convivimos más, hacemos ejercicio y no gastamos en gasolina”. Ahora bien ¿qué es la movilidad sustentable? Es importante plantear esta pregunta para evitar confundirla con la electromovilidad. La primera comprende un esquema jerarquizado de acciones que ubica en primer lugar evitar los traslados, después cambiar el modo de movernos y finalmente mejorar las tecnologías disponibles para hacerlo. Es decir, la electromovilidad abarcaría un aspecto de un esquema más amigable con el medio ambiente (siempre y cuando la carga del vehículo sea con electricidad generada libre de emisiones contaminantes), pero por sí sola es insuficiente para descarbonizar el transporte. Cambiar el modo en que nos movemos y, en última instancia, evitar los desplazamientos, representan retos muy complejos en las ciudades que han crecido hacia las periferias, donde las viviendas y los centros de trabajo, los lugares de recreación, comercios, servicios y escuelas se encuentran lejos entre sí. Además de provocar congestión vial, contaminación, ruido y estrés para la población, esta situación ocasiona que, en promedio, los hogares mexicanos destinen cerca del 20% de sus ingresos al transporte. La mayoría de la población aspira a adquirir un auto para desplazarse, a falta de transporte público suficiente, seguro y accesible y de infraestructura adecuada para caminar. Paradójicamente, las personas con menores ingresos enfrentan más obstáculos para vivir sin auto, pues la compra y renta de vivienda cerca de donde hay más actividad comercial y de servicios está lejos de su alcance presupuestal. Sin embargo, con el suficiente poder adquisitivo, familias como la de G pueden optar por vivir más cerca de todo. Al reducir las distancias entre su hogar y las diferentes actividades que realizan diariamente, evitan prácticamente todos los desplazamientos que antes hacían en su camioneta, cambiaron radicalmente la manera en que se mueven y redujeron drásticamente sus emisiones cotidianas. Vivir car-free es, de hecho, la medida con mayor impacto para reducir las emisiones personales, mucho más efectiva que reciclar, hacer composta, o dejar de comer carne. Además, la movilidad activa (caminar, usar la bicicleta u otros medios no motorizados) mejora la salud física y mental, la convivencia familiar y la relación con la comunidad. A escala urbana, reduce la congestión vial, el ruido y los accidentes viales. ¿Cómo lograr que la vida sin auto sea accesible para todos, independientemente del ingreso o la ubicación? Se requiere una combinación de: condiciones del entorno físico; alternativas accesibles de transporte público; el interés personal y un cambio sociocultural que comprenda todos los ámbitos de la actividad urbana. Viviendas, vialidades, banquetas y cruces peatonales deben atender primero las necesidades de los peatones, en segundo lugar las del transporte público; en tercer lugar la de los vehículos particulares eléctricos (incluyendo vehículos de 2 y 3 ruedas) y finalmente las de los vehículos individuales motorizados. Las reconfiguraciones del espacio público con este propósito en algunas zonas de distintas ciudades del país han promovido, aunque lentamente, cambios en la manera en que se percibe y se usa el espacio. Pero hace falta una transformación radical que no solo está en manos del gobierno. Esta transformación debe ser, en primer lugar, cultural, relacionada con los hábitos, tradiciones e inercias de comportamiento de las personas. Se requiere descentralizar al auto y reubicarlo en un lugar de herramienta, dejar de verlo como un fin en sí mismo, como objeto de deseo y sujeto de protección y privilegio por encima de las personas. Las ciudades surgieron por la necesidad de las personas de vivir en comunidad para satisfacer sus necesidades. Debemos recuperar este propósito para que el futuro posible sea uno en el que las ciudades ofrezcan una movilidad sostenible para todos sus habitantes. ¿O es que realmente queremos un futuro lleno de cybertrucks? Este texto se publicó en Expansión ESG el 9 de mayo de 2025 https://esg.expansion.mx/opinion/2025/05/09/electromovilidad-necesaria-pero-no-suficiente Facebook Twitter LinkedIn Noticias recientes Electromovilidad: necesaria pero no suficiente Leer más ICM reconoce el legado de Francisco en pro de resolver la crisis ambiental con justicia Leer más Cumbre climática urge movilizar el financiamiento climático en
ICM reconoce el legado de Francisco en pro de resolver la crisis ambiental con justicia

ICM reconoce el legado de Francisco en pro de resolver la crisis ambiental con justicia Olvidamos que nosotros mismos somos tierra (cf. Gn 2,7). Nuestro propio cuerpo está constituido por los elementos del planeta, su aire es el que nos da el aliento y su agua nos vivifica y restaura. Encíclica Laudato si’. Sobre el cuidado de la casa común Ciudad de México, 21 de abril de 2025.- El legado del papa Francisco (1936-2025) se traduce en diversos ámbitos dentro del mundo católico y fuera de éste. Una de sus contribuciones más celebradas es la encíclica Laudato si’. Sobre el cuidado de la casa común, emitida el 18 de junio de 2015, en la cual retomó las discusiones sobre el tipo de desarrollo al que la humanidad debiera aspirar. Se considera que en este texto, el papa recuperó reflexiones de la filosofía medioambiental en el contexto de la teología moral católica. En lo que fue la primera encíclica de su papado, Francisco ubicó en el centro las dos crisis de nuestro tiempo: desarrollo y medio ambiente. Se reconoce que logró alinear, por primera vez en la historia de la Iglesia católica, las preocupaciones en torno a la pobreza y a la crisis climática. En América Latina, Laudato si’ fue bien recibida por ambientalistas que venían cuestionando la destrucción de la naturaleza a manos de intereses ligados al carbón y al petróleo. El título de la encíclica, el papa lo tomó de un cántico del siglo XIII de San Francisco de Asís, y significa “alabado seas”. Su objetivo fue hacer un llamado a cambiar actitudes, comportamientos, políticas y a asumir responsabilidad por los daños causados al entorno natural debido a un paradigma económico que margina a los pobres y olvida la solidaridad. Asimismo, puntualizó que la crisis ecológica invita a una profunda conversión interna. En ICM continuaremos trabajando con organizaciones como la Arquidiócesis Primada de México y el IMDOSOC en la divulgación del mensaje de Laudato si’. En particular, su llamado a considerar que el cuidado de los ecosistemas supone una mirada que va más allá de lo inmediato y que debe atender los altísimos costos de la degradación ambiental, e implica modificar las grandes estructuras ineficientes que gastan energía y agua en exceso, así como transformar una cultura del descarte. “Lamentablemente, muchos esfuerzos para buscar soluciones concretas a la crisis ambiental suelen ser frustrados no sólo por el rechazo de los poderosos, sino también por la falta de interés de los demás. Las actitudes que obstruyen los caminos de solución, aun entre los creyentes, van de la negación del problema a la indiferencia, la resignación cómoda o la confianza ciega en las soluciones técnicas”. Texto completo de la encíclica Laudato si’: https://www.vatican.va/content/francesco/es/encyclicals/documents/papa-francesco_20150524_enciclica-laudato-si.html Sobre el trabajo de ICM con IMDOSOC y la Arquidiócesis Primada de México: https://www.imdosoc.org/post/acciones-desde-laudato-si Para una discusión sobre la encíclica Laudato si’ en el ámbito académico medioambiental véase: Environment: Science and Policy for Sustainable Development, Vol. 57, no. 6, oct. 2015. Facebook Twitter LinkedIn Noticias recientes ICM reconoce el legado de Francisco en pro de resolver la crisis ambiental con justicia Leer más Cumbre climática urge movilizar el financiamiento climático en México Leer más Organizaciones de la sociedad civil apoyan la transición energética planteada por la presidenta Sheinbaum Leer más
Cumbre climática urge movilizar el financiamiento climático en México

Cumbre climática urge movilizar el financiamiento climático en México Presentan herramienta digital para estructurar proyectos climáticos subnacionales y facilitar su acceso a financiamiento. Ciudad de México, 11 de abril de 2025.- Representantes de gobiernos locales, instituciones financieras y organizaciones civiles se dieron cita en la Tercera Cumbre de Financiamiento Climático Subnacional con el fin de fomentar alianzas estratégicas, compartir herramientas para fortalecer capacidades e impulsar mecanismos innovadores de financiamiento climático. El evento reunió a cerca de 70 participantes convocados por la Comunidad Climática Mexicana (CCM), una iniciativa de la Asociación Nacional de Autoridades Ambientales Estatales, A.C (ANAAE), la Iniciativa Climática de México (ICM) y el Instituto de Recursos Mundiales (WRI, por sus siglas en inglés). En el evento se visibilizaron las oportunidades, limitaciones y condicionantes para el acceso a financiamiento en el ámbito local. Particularmente, se expuso cómo se dirigen y asignan los recursos hacia proyectos climáticos desde la federación, las organizaciones de la cooperación internacional, y el sector privado. Los participantes subrayaron la urgencia de establecer una alianza para el financiamiento climático subnacional, que permita a las entidades y organismos que la integren impulsar una participación estratégica y anticipada que promueva el flujo de financiamiento climático para implementar medidas de mitigación o adaptación en ámbitos locales y regionales. Asimismo, se subrayó que esta alianza habrá de facilitar el intercambio de buenas prácticas, promover la creación y el fortalecimiento de mecanismos locales de financiamiento climático; impulsar estrategias innovadoras de financiamiento; y garantizar una gobernanza colaborativa, eficaz y de largo plazo. “Eventos como este son fundamentales para fortalecer la capacidad de los gobiernos locales para acceder a financiamiento climático. La participación en estos espacios de instituciones financieras nacionales e internacionales, autoridades subnacionales y organizaciones especializadas permite cerrar brechas, identificar estrategias concretas y establecer mecanismos conjuntos que aceleren la acción climática y faciliten la movilización de recursos”, subrayó Gabriela Rodríguez, Directora de Política y Finanzas Climáticas de la Embajada Británica en México. Transformar iniciativas en proyectos robustos Durante la Cumbre, la CCM presentó la “Herramienta para la Estructuración de Proyectos Climáticos Subnacionales”, un recurso digital y gratuito diseñado para ayudar a gobiernos locales a transformar iniciativas en proyectos sólidos y alineados con los requisitos de financiamiento nacional e internacional. La herramienta cuenta con 11 módulos teórico-prácticos y se puede encontrar en la página web de la CCM. Representa una guía práctica y flexible para estados, municipios y organismos públicos que están en el proceso de planeación, estructuración y desarrollo de proyectos climáticos de inversión pública en México. Su valor radica en que permite a los usuarios evaluar y fortalecer iniciativas de mitigación y adaptación al cambio climático en cualquier fase de desarrollo. “La herramienta se desarrolló en el marco de un acompañamiento brindado por la Comunidad Climática a 12 gobiernos subnacionales sobre la planeación y estructuración de proyectos climáticos. Este recurso sintetiza las lecciones más valiosas de este proceso de un año, buscando atender los desafíos más comunes que enfrentan este tipo de iniciativas mediante una plataforma interactiva, accesible y basada en experiencias y soluciones reales”, destacó Jorge Villarreal, director de Política Climática de ICM. La urgencia del financiamiento climático subnacional Los gobiernos locales son la primera línea de defensa contra el cambio climático. Estados y municipios no sólo pueden mitigar un porcentaje significativo de las emisiones de gases de efecto invernadero en México, sino que también enfrentan impactos climáticos de manera directa. Por ello, fortalecer sus capacidades y garantizar su acceso a financiamiento es clave para reducir su vulnerabilidad actual y futura. “Las metas climáticas de México no se cumplirán sin los estados y municipios. Pero para ello, las estrategias nacionales e internacionales deben traducirse en mecanismos operativos, presupuestos etiquetados y capacidades reales a nivel subnacional. Esto implica rediseñar cómo fluye el financiamiento desde fuentes multilaterales y federales hacia lo local, con reglas claras, ventanillas accesibles y acompañamiento técnico”, apuntó Francisco Barnés, director ejecutivo de WRI México. Uno de los principales desafíos identificados en el acceso a financiamiento son las barreras técnicas y de conocimiento que limitan el desarrollo de proyectos sustentables de mitigación y adaptación. La agilización y simplificación de los mecanismos financieros es fundamental para que más iniciativas puedan acceder a los recursos necesarios para su implementación. Asimismo, la equidad y la inclusión deben ser ejes centrales en la movilización de fondos climáticos. El financiamiento necesita priorizar a las comunidades más vulnerables, asegurando que los gobiernos subnacionales cuenten con las capacidades técnicas para diseñar proyectos equitativos y con beneficios distribuidos de manera justa. Colaboración estratégica para potenciar la inversión climática La cooperación entre gobiernos locales, bancos de desarrollo, organismos internacionales y el sector privado es clave para canalizar financiamiento hacia proyectos climáticos con impacto tangible y sostenible. Espacios como la Cumbre fortalecen estas alianzas y abren oportunidades para avanzar en soluciones climáticas efectivas desde lo local. La ANAAE reiteró la relevancia de la construcción de alianzas y el fomento de espacios de diálogo para generar oportunidades y movilizar recursos que favorezcan la transición energética justa en el país. Contacto con medios: Ana Laura de la Torre – ana.delatorre@iniciativaclimatica.org Facebook Twitter LinkedIn Noticias recientes